Un pequeño hilo de nube
baja desde en el horizonte
donde mi mirada se pierde...
donde el sol se esconde...

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Y el mar calmo
viene desnudo
a rosar mis pies
que enterrados en la arena
parecen desaparecer...

​

Oh magestuosa visión
que surge como una promesa
de que un día tu y yo
encontraremos la paz
que tanto necesita
nuestra existencia...

​

En esta vida
o en alguna otra
creceremos como hiedra
unidos desde adentro
unidos desde afuera...

​

Por esa vida esperaré
y verás que esta promesa
que hoy te hago
un día se hará realidad
y ya no llorarás
porque sabrás
que siempre te he amado
y que siempre me amarás
allá adentro
muy dentro
donde nadie nos pueda ver
allá adentro
muy dentro
donde nadie nos pueda separar.

​

​

Jessica Carrasco